Foto: Gentileza Ministerio de Seguridad de Santa Fe
El Litoral
Prensa Ministerio de Seguridad de Santa Fe
Personal de la Dirección General de Prevención y Control de Adicciones secuestró 900 gramos de drogas al realizar el miércoles un allanamiento en una vivienda de calle Formosa al 7400 en barrio San Agustín II de la ciudad de Santa Fe.
En el lugar fueron secuestrados 140 envoltorios y una bolsa ambos con marihuana, los que alcanzaron un peso de 400 gramos; y alrededor de 500 gramos de cocaína los que se encontraron en 12 tubos eppendorf y en una bolsa. Además se incautaron cuatro celulares; 31 tubos acrílicos vacíos y 3.812 pesos en efectivo, entre otros elementos y documentación de interés para la causa.
En este procedimiento, fueron detenidos el principal investigado, un hombre de 46 años, y otra persona sobre la que pesaba un pedido de captura por no haber regresado de una salida transitoria de la cárcel donde cumplía condena por un hecho de homicidio. Se trata de un hombre de 38 años, quién era requerimiento por el juzgado penal de sentencia de Santa Fe desde el año 2013.
La investigación estuvo a cargo de la Brigada Operativa Departamental I, a cargo de Martín Oliva y comenzó en abril pasado. En el allanamiento colaboró la Policía de Acción Táctica como grupo de irrupción. Interviene el juzgado federal N°2, secretaría y fiscalía federal en turno de Santa Fe.
Resultados
El subsecretario de Investigación Criminal y Policías Especiales, Rolando Galfrascoli, destacó que “desde hace unos meses a esta parte la jefatura que ejerce el oficial Martín Oliva ha impreso una verdadera transformación de trabajo y eficiencia en los resultados de la Brigada Departamental de Santa Fe dependiente de la Dirección de Drogas”.
En ese sentido, Galfrascoli dijo que “estamos cumpliendo con el mandato del ministro Maximiliano Pullaro y del gobernador Miguel Lifschitz que han puesto en nosotros la responsabilidad y confianza de designar a los nuevos jefes de las brigadas y se están viendo los resultados”.
El funcionario provincial manifestó que “la apuesta por policías jóvenes, profesionales, valientes y honestos sigue siendo el camino para dar el combate a las drogas y a las organizaciones que realizan estos delitos”.
En ese sentido Galfrascoli recordó que “la policía de drogas ha tenido que vencer prejuicios e historias grises pero sabemos que estamos por el buen camino con estos jóvenes comprometidos que acompañan sus jefes policiales y los funcionarios políticos”.
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