La Asamblea Popular de Ciudadanos Empoderados de Rafaela, como
nuevo espacio de militancia popular, surgido de la necesidad de defender los
derechos y las conquistas obtenidos durante los últimos doce años, manifiesta
su profunda preocupación y malestar ante
las últimas medidas económicas implementadas por el nuevo Gobierno Nacional, y
por su impacto en el poder adquisitivo del salario de los trabajadores, al
haberse acelerado el ritmo inflacionario y, especialmente, por los aumentos
indiscriminados de precios, reflejados en los productos que constituyen la
canasta básica de alimentos. Todo lo cual vaticina
un horizonte complicado para la inmensa mayoría de los trabajadores.
La sola expectativa del alza del tipo de cambio ya había
repercutido negativamente sobre los precios, con una fuerte aceleración -ya
desde antes de que asumiera el nuevo gobierno-, originando una carrera en
desmedro del salario de los trabajadores. Frente a los anuncios de campaña,
algunos de los actores más poderosos de la economía, en una actitud
cuestionable, aumentaron indiscriminadamente los precios de muchos productos de
consumo popular, encareciendo notablemente -y en muy pocos días- el costo de
vida de los sectores populares.
Hoy nuestra preocupación va en aumento, a partir de que no
observamos hasta el momento medida alguna tendiente a proteger el salario de
los trabajadores, frente al fenomenal combo de medidas liberales que han
incluido: la fuerte devaluación de la moneda
nacional, la
dolarización de los precios de los alimentos a raíz de la eliminación/reducción
de retenciones, el debilitamiento del esquema de regulación estatal de precios,
con el previsible achicamiento del consumo, como medidas
inaugurales que se articularán con los ya anunciados aumentos en las tarifas de
los servicios públicos, y al
incipiente abandono de la potestad del Estado Nacional de regular el comercio
exterior para proteger el empleo nacional.
Frente a este escenario desalentador, esta Asamblea Popular
siente la responsabilidad de salir públicamente en defensa de los intereses de
los trabajadores, los cuales son inalterables, independientemente de los
contextos políticos. Y en este sentido, los trabajadores no vamos a aceptar
bajo ningún punto de vista que se vuelva a las viejas recetas liberales
tendientes a asegurar la rentabilidad de las grandes empresas, en desmedro del
salario, el consumo popular, y finalmente, de nuestros puestos de trabajo.
Nuestro país ya ha sufrido las consecuencias de transitar,
en distintos tramos de su historia, el camino de la liberalización de la
economía: cuando desaparece el Estado y se permite que el Mercado sea el que
distribuye los ingresos, dando inicio de esta manera a una constante
transferencia de recursos, desde el pueblo trabajador hacia los sectores
concentrados de la economía, tal como lo estamos comenzando a presenciar. En
este contexto, vamos a defender junto a las organizaciones sindicales la plena
vigencia del sistema de paritarias libres, sin techos ni condicionamientos de
ninguna naturaleza.
Por otra parte, repudiamos decididamente la represión como
solución del Estado frente a los conflictos de los trabajadores, que no hacen
mas que reclamar legítimamente por sus derechos laborales. Y en este sentidos
sostenemos firmemente que no hay democracia plena cuando se restringe o se
condicionan los derechos de los trabajadores.
Finalmente, frente a esta difícil coyuntura que atraviesan
la totalidad de los asalariados, jubilados, pensionados, y sectores populares
en general, hacemos un llamado a la unidad de todos los trabajadores, puesto
que entendemos que la unidad del Movimiento Obrero será la única garantía para
preservar los derechos laborales y la defensa del interés nacional.
Asamblea Popular de Ciudadanos Empoderados de
Rafaela, Diciembre de 2015.-
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