Los fiscales a cargo de la investigación del atentado elaboran un escrito para evitar que Interpol cancele las circulares rojas. Desacuerdos y alejamientos entre sus integrantes.
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Rodolfo Canicoba Corral, juez de la causa AMIA, estaba reunido con el entonces fiscal Patricio Sabadini en su despacho de los tribunales de Retiro. Sabadini era hasta el martes uno de los miembros de la UFI-AMIA, encargada de la investigación por el atentado a la mutual judía en 1994.
Fue a mediados de agosto. Ese día, se presentaron en el juzgado un comisario de Interpol, el número dos de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI, ex SIDE), Juan Martín Mena, y un diplomático de la Cancillería, cuyo último destino internacional fue Viena. Traían un trámite urgente y poco tiempo para resolverlo.
Tres de los iraníes con pedido de captura y circulares rojas de Interpol contrataron a un estudio jurídico en Londres y presentaron un recurso ante la Comisión de Control de los Ficheros (CCF) de Interpol, un órgano de control independiente, y pidieron que se revisen sus casos y se levanten sus circulares rojas para que puedan circular libremente por el mundo.
Conflicto. Sabadini venía sosteniendo una tensa relación con sus colegas de la UFI-AMIA, Sabrina Namer y Roberto Salum. “Estoy en minoría”, le confesó a dos funcionarios judiciales en los últimos meses. Intentó explicar las razones al juez Canicoba Corral, pero el magistrado le dijo que prefería no involucrarse en internas de la fiscalía. Ahora Sabadini no quiere hablar. El lunes, la Procuradora General de la Nación, Alejandra Gils Carbó, trasladó a Sabadini a cargo de la fiscalía federal del Chaco.
El futuro de los pedidos de captura de los iraníes acusados del mayor acto de terrorismo que sufrió la Argentina aparece en el centro del conflicto.
Sabadini dijo a PERFIL que nunca estuvo en esa reunión. No dicen lo mismo el Ministerio de Seguridad, el juez Canicoba Corral y la UFI-AMIA que lo confirmaron a PERFIL. La Argentinadebe presentar en tiempo record qué pruebas tiene contra tres de los iraníes acusados de volar la mutual judía para sostener las circulares rojas
“La UFI AMIA está elaborando un escrito cuestionando la medida de Interpol y el juez federal nos está avalando”, reconoció ayer Sabadini ante la insistencia de este diario. Se negó a seguir contestando preguntas y a admitir si las circulares rojas contra los iraníes vencen en diciembre. O a admitir lo que habría dichos en los últimos días a algunos de sus compañeros en la UFI-AMIA: “El muerto tenía razón”. En referencia a Alberto Nisman.
La UFI-AMIA consiguió una prórroga para poder presentar las pruebas para sostener los pedidos. El juez Canicoba Corral y el canciller Héctor Timerman insistieron ante Interpol que los pedidos de captura internacional de los iraníes están firmes. Mena dijo al juez Canicoba durante la reunión que el Gobierno no iba a pagar el costo si Interpol presionaba a favor de los iraníes en medio de un acuerdo entre Irán y los Estados Unidos. Interpol, a través de los voceros de Seguridad, negaron que el organismo tuviera esa intención.
La fecha de la presentación de los iraníes ante la CCF es clave. En el Ministerio de Seguridad no saben si es de septiembre de 2014 o de los últimos meses. En el juzgado federal sostienen que es de los últimos meses. En la UFI-AMIA algunos se preguntan si tiene que ver con las declaraciones de Juan Patricio Murray, coordinador de la UFI-AMIA, a Página/12 el 12 de julio pasado: “En la causa AMIA vemos muchos informes de inteligencia y poca prueba judicial. Pero más grave es que vemos que hubo poca pro-actividad, poca búsqueda de pruebas judiciales que son imprescindibles para condenar a sospechosos”.
Si los pedidos de los iraníes son posteriores a estas declaraciones, la Justicia argentina y el Gobierno podrían haber dado los elementos para la presentación ante la CCF. Así lo creen algunos miembros de la investigación. En el Gobierno y la Procuración dicen que es un “disparate”. Resta que alguien en esta causa aclare en qué fecha los iraníes se presentaron ante la CCF. Entonces correrá agua más clara.
Aquello que resulta indiscutible es que los pedidos de captura corren peligro.
Contra Stiuso. El coordinador Murray es el encargado de revisar los archivos e información de inteligencia de Jaime Stiuso, enemigo público número uno de la Presidenta y autoexiliado en los Estados Unidos, según proclamó la mandataria ante la asamblea de la ONU esta semana.
Fernández de Kirchner acusó a los Estados Unidos de proteger al ex espía, quien según el gobierno argentino se encuentra en territorio norteamericano.
El lunes, Oscar Parrillli, jefe de la AFI, denunció a Stiuso otra vez por incumplimiento de deberes de funcionario público y pidió a la UFI-AMIA que solicite la circular azul a Interpol para que lo traigan a compadecer como testigo al juicio por irregularidades en la investigación de la primera causa AMIA (ver aparte). La Justicia federal se lo negó.
Fuentes de la UFI-AMIA y del oficialismo coincidieron en que la circular azul fue la gota que rebalsó el vaso en la unidad fiscal y terminó por eyectar a Sabadini por supuestas disidencias con la presentación.
Los choques entre Sabadini y sus colegas eran permanentes en los últimos tiempos, pero se agravaron en las últimas semanas.
Ante las consultas de PERFIL, Sabadini no quiso explicar porqué.
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