Fue este martes a la tarde alrededor de las 16 en la escuela Técnica 468, cuando un alumno que estaba rindiendo examen se descompensó y el servicio sanitario recién acudió luego de un llamado al 911.
La Capital |
Un chico de 18 años se descompuso mientras estaba rindiendo un examen y la ambulancia llegó casi media hora después, luego de que el servicio de emergencia reibiera el llamado del 911.
El hecho sucedió esta tarde, alrededor de las 16, en la escuela Técnica Nª 468 de la ciudad, cuando un joven estaba rindiendo y en ese moemtno pidió permiso para ir al baño. Empezó a caminar y se desvaneció provocando la lógica preocupación de sus compañeros, profesores y directivos.
Las autoridades de la escuela llamaron inmediatamente al servicio de emergencia que tiene a su cargo la cobertura de la institución, quienes pretendían que el chico que estaba desvanecido y convulsionado le dijera cuáles eran los síntomas que tenía.
Al pasar varios unos minutos y ver que no tenían respuesta desde el servicio de emergencias llamaron al SIES, desde donde le dijeron que si el chico se hubiese descompuesto en la calle podrían asistirlo, pero que al ser dentro de la escuela y tener servicio no podían asistirlo.
Pero como los minutos pasaban y la ambulancia no llegaba, las autoridades de la escuela al ver que el chico no reaccionaba se comunicaron con el 911, que desde ahí llamaron al servicio de emergencias que unos minutos después -alrededor de 25 minutos después del primer llamado- arribó al lugar.
Sin embargo, y más allá de que en este caso la situación terminó bien, las autoridades de la escuela están muy preocupados por si alguna situación similar se repite y no encuentran eco a sus llamadas en los servicios de emergencias.
Así se expresó el director de la escuela, Enzo Lemos, quien se mostró indignado por la situación. "En el momento en que se descompone lo ve personal de la escuela, que le realiza primeros auxilios, y se llama al servicio de emergencias. Una vez pasado los 5 minutos se vuelve a llamar a emergencias, tampoco vinieron y demoraron alrededor de 25 minutos en venir, mientras el alumno estaba aparentemente convulsionado", contó el director en diálogo con LT 3.
"El problema que tenemos es justamente la falta de respuestas de este servicio, que en una de las comunicaciones nos pidieron que viniera el chico a explicar lo que tenía y estaba convulsionado. Muchas veces nos vemos desprotegidos ante este tipo de situaciones", sentenció Lemos.
El alumno está bien, se fue recuperando de la descompensación y estaba junto a sus padres que llegaron un rato después.
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