sábado, 14 de junio de 2014

La monarquía en crisis: el mapa de los reyes del siglo XXI

Más de una veintena de monarcas resisten ante las nuevas formas de gobierno. La abdicación del rey Juan Carlos en España abrió nuevos interrogantes.
Infobae | 
La monarquía en crisis: el mapa de los reyes del siglo XXI

 La abdicación del rey Juan Carlos y las posteriores protestas en España contra la monarquía, sumado al escándalo por corrupción que salpicó a su hija, la infanta Cristina de Borbón, ha abierto la discusión en el país y fuera de él sobre la vigencia de esta forma milenaria de gobierno.
Pero no todas las monarquías son iguales. Aunque formalmente existen tres tipos -parlamentarias, constitucionales y absolutas-, lo cierto es que en cada país adoptan formas y características particulares. Desde funciones absolutamente simbólicas y ceremoniales, hasta la concentración de todo el poder de la nación en una sola persona, pasando por la "rotación" del sultanato, los monarcas pueden representar cosas muy diferentes en cada país.
Aquí, el listado con "los monarcas del siglo XXI":

Monarquías parlamentarias: es la forma política de muchas de las democracias occidentales en las que rige la monarquía. El rey no gobierna, puesto que está subordinado a los poderes legislativo y ejecutivo. Es el régimen en el que el monarca tiene el poder más simbólico y menos real.
Noruega
En el país nórdico, las atribuciones de la pareja real son más simbólicas que políticas, aunque según un sondeo reciente, la corona cuenta con una amplia aceptación. Se trata de una monarquía parlamentaria, actualmente encabezada por Harald V, quien también es el jefe de la Iglesia luterana.
Dinamarca
Después de varios siglos de monarquía absoluta, se convirtió en una constitucional en 1849, para luego pasar a una parlamentaria en 1901. Se trata de la monarquía más antigua del mundo, que hoy encabeza la reina Margarita II.
Bélgica
El rey Felipe está al frente de la monarquía parlamentaria belga desde la abdicación de su padre, el rey Alberto II, salpicado por varios escándalos que incluyen el pedido de reconocimiento de una supuesta hija ilegítima. La monarquía juega un rol moderador y de unificación entre las distintas regiones del país.
Luxemburgo
 
 
 
El pequeño y rico país europeo es el único gran ducado de la actualidad. El gran duque Enrique es el encargado de nombrar al primer ministro y, aunque constitucionalmente esté investido del poder ejecutivo, posee sólo funciones ceremoniales.
Lesoto
Este país de poco más de 2 millones de habitantes y enclavado en Sudáfrica, es regido por la Constitución, aunque la jefatura de Estado es ejercida por el rey Letsie III. Es el encargado de nombrar a los 33 miembros del Senado.
Jordania
A pesar de tratarse de una monarquía parlamentaria, el rey Abdalá II sigue conservando amplias facultades de carácter ejecutivo. Entre ellas, le corresponde nombrar a los 75 miembros del Senado, el órgano encargado de aprobar enmendar o rechazar las leyes. Además, el rey es quien nombra al presidente del Tribunal Constitucional, compuesto por nueve jueces.
Bután
Hasta el año 2008, cuando se llamaron a elecciones parlamentarias, la de Bután era una monarquía absoluta. Desde entonces, aunque el rey Jigme Khesar Namgyal Wangchuck es jefe de Estado, la Constitución de 2008 otorga la autoridad al Parlamento para destronarlo eventualmente con dos tercios de los votos.
Japón
En 1989 asumió la corona el actual monarca, el emperador Akihito. Aunque se trata de una figura ceremonial, formalmente posee el cargo de jefe de Estado.

Monarquías constitucionales: en esta forma de gobierno, el rey es además el jefe de Estado, y aunque conserva algunas funciones de gobierno, éstas están reguladas por la constitución.
Reino Unido
La reina Isabel II es monarca, además del Reino Unido, de los territorios británicos de ultramar y la jefa de Estado de los 15 países que forman parte de la Commonwealth (Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Jamaica, Barbados, Bahamas, Granada, Papúa Nueva Guinea, Islas Salomón, Tuvalu, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Belice, Antigua y Barbuda y San Cristóbal y Nieves).
Suecia
Al frente de la monarquía constitucional está el rey Carlos XVI Gustavo, quien tiene funciones limitadas. Varios escándalos protagonizados por el monarca han hecho tambalear su popularidad, que aún así resiste entre los suecos.
Mónaco
 
 
 
Sólo a partir de 1962, el poder en el Principado de Mónaco dejó de transmitirse por derecho divino. Aunque el monarca Alberto II supervisa el Consejo Nacional y el Ejecutivo, delega el poder a los órganos correspondientes.
Liechtenstein
Liechtenstein es una monarquía constitucional con base parlamentaria. El príncipe Juan Adán II y el pueblo comparten la soberanía y ambos la ejercen según las disposiciones de la Constitución. A diferencia de otros gobiernos de este tipo, Juan Adán II tiene poderes importantes, como el de vetar leyes en el Parlamento.
Holanda
En el reino de los Países Bajos, el rey Guillermo Alejandro desempeña el poder ejecutivo y ratifica la libre elección del primer ministro por parte del pueblo.
Tailandia
 
 
 
El jefe del Es­tado y comandante en jefe de las Fuerzas Armadas es, desde 1946, el rey Bhumibol Adulyadej, noveno monarca de la dinastía Chakri. La última Constitución, de 2007, establece que el soberano tiene que aprobar al primer ministro, elegido entre los miembros electos de la Cámara de Diputados.
Bahrein
Aunque oficialmente se trata de una monarquía constitucional, la mayoría de los observadores y los mismos ciudadanos la consideran una monarquía absoluta, debido a la opresión que ejerce el monarca Hamad bin Isa Al Jalifa sobre el Parlamento y el Poder Judicial.
Camboya
De acuerdo con la Constitución, el rey -miembro de una dinastía- es jefe de Estado, pero las funciones de Norodom Sihamoní son mayormente simbólicas. La particularidad de Sihamoní es que recientemente fue sujeto de un referéndum, en el que la mayoría de la población decidió la continuidad de la monarquía como forma de gobierno.
Malasia
A pesar de que el sultanato malasio está inspirado en la monarquía británica, posee un peculiar mecanismo rotativo. El jefe de Estado es el Yang di-Pertuan Agong -gobernante supremo, en malayo-, que es elegido cada cinco años entre los sultanes de los estados malasios. Actualmente reina el 24º rey de Malasia y sultán del estado de Kedah, Abdul Halim.
Bután
Hasta el año 2008, cuando se llamaron a elecciones parlamentarias, la de Bután era una monarquía absoluta. Desde entonces, aunque el rey Jigme Khesar Namgyal Wangchuck es jefe de Estado, la Constitución de 2008 otorga la autoridad al Parlamento para destronarlo eventualmente con dos tercios de los votos.
Marruecos
Aunque, según la Constitución de 2011, el país tiene una monarquía constitucional con un Parlamento elegido por el pueblo, el rey Mohamed VI tiene amplios poderes ejecutivos y puede disolver el gobierno y el Parlamento, además de ser la cabeza de las Fuerzas Armadas. También tiene la función de ser el líder religioso del país.


Monarquía absoluta: El rey de una monarquía absoluta concentra en su persona todo el poder de la nación. Las leyes y las instituciones dependen de su voluntad.
Brunéi
Se trata de un sultanato autoritario cuya cabeza, el sultán Muda Hassanal Bolkiak, es miembro de una dinastía que gobierna el país hace más de seis siglos. El monarca cuenta con una fortuna que alcanza los U$S 20.000 millones, una de las riquezas personales más grandes del mundo.
Suazilandia
El país africano es una de las cuatro monarquías absolutas que siguen existiendo en el mundo. El rey Mswati III, que está en el poder desde 1986, es jefe de Estado y también quien nombra a los ministros. Tiene bajo su control tanto el Poder Ejecutivo como el Legislativo.
Arabia Saudita

 
 
 
El gobierno saudita está basado en los principios islámicos, con una de las interpretaciones más rigurosas de la sharia en el mundo, y se mantiene como una teocracia desde hace más de 80 años. Su Constitución es el Corán.

No hay comentarios:

Publicar un comentario