El jefe de Gabinete dice que el gobierno no fue notificado. Pero Smata ya acusó recibo de la medida y no descarta medidas de fuerza, aunque no serían inmediatas.
De la redacción de El Litoral
DyN
No habría al menos hasta junio medidas de fuerza de Smata en la planta de General Motors en Alvear, al sur de Rosario. Hay 2.700 trabajadores que ayer recibieron la noticia de un descuento del 35 % de sus salarios; fue pocas horas antes de que las automotrices se reunieran en Buenos Aires con los ministros de Industria, Débora Giorgi y de Economía, Axel Kicillof.
La pulseada entre el gobierno y las automotrices está latente. Las terminales no tienen a quién venderle y el gobierno pide no despedir gente. Hay algo en esa ecuación que no cierra, aunque General Motors por ahora sigue adelante en su “Plan Fénix”. una inversión de $ 2.100 millones para producir un nuevo modelo de gama media-alta, de exportación, que le permitirá ingresar más divisas y compensar con la importación de los productos caros que la marca trae a la Argentina.
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, dijo hoy esperar una “notificación formal” de GM. “Hemos estado en contacto con la ministra de Industria (Débora Giorgi) y de Trabajo (Carlos Tomada), pero no ha habido notificación formal, y al no tenerla, no podemos emitir opinión al respecto”.
Aunque no se lo hayan dicho a la Casa Rosada, los empresarios ya lo avisaron al gremio. El secretario adjunto del SMATA de Rosario, Antonio Milici, dijo que recibió la notificación de los descuentos salariales el martes por la noche; en sede gremial recordaron que se tomaron precauciones que permitirán a los trabajadores percibir horas extras “guardadas” a manera de recurso ante la emergencia, pero al mismo tiempo advirtieron que el convenio no admite descuentos superiores al 20 % en los sueldos.
Milici dijo que se va a reunir “con la patronal para aclarar esta situación. No obstante nuestro gremio rechaza los descuentos y no se descartan medidas de fuerza”, subrayó.
La empresa, el pasado 13 de mayo, informó que se aplicaría un plan de emergencia con la interrupción de tareas todos los viernes de mayo y junio, como consecuencia de la merma de demanda desde Brasil.
Entonces, la compañía norteamericana garantizó que mantendría los puestos de trabajo y los sueldos. El gobernador Antonio Bonfatti dio el miércoles un mensaje de tranquilidad a los trabajadores, al señalar que “se trataba de una situación de alerta, pero no de mayor conflicto”.
DyN
No habría al menos hasta junio medidas de fuerza de Smata en la planta de General Motors en Alvear, al sur de Rosario. Hay 2.700 trabajadores que ayer recibieron la noticia de un descuento del 35 % de sus salarios; fue pocas horas antes de que las automotrices se reunieran en Buenos Aires con los ministros de Industria, Débora Giorgi y de Economía, Axel Kicillof.
La pulseada entre el gobierno y las automotrices está latente. Las terminales no tienen a quién venderle y el gobierno pide no despedir gente. Hay algo en esa ecuación que no cierra, aunque General Motors por ahora sigue adelante en su “Plan Fénix”. una inversión de $ 2.100 millones para producir un nuevo modelo de gama media-alta, de exportación, que le permitirá ingresar más divisas y compensar con la importación de los productos caros que la marca trae a la Argentina.
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, dijo hoy esperar una “notificación formal” de GM. “Hemos estado en contacto con la ministra de Industria (Débora Giorgi) y de Trabajo (Carlos Tomada), pero no ha habido notificación formal, y al no tenerla, no podemos emitir opinión al respecto”.
Aunque no se lo hayan dicho a la Casa Rosada, los empresarios ya lo avisaron al gremio. El secretario adjunto del SMATA de Rosario, Antonio Milici, dijo que recibió la notificación de los descuentos salariales el martes por la noche; en sede gremial recordaron que se tomaron precauciones que permitirán a los trabajadores percibir horas extras “guardadas” a manera de recurso ante la emergencia, pero al mismo tiempo advirtieron que el convenio no admite descuentos superiores al 20 % en los sueldos.
Milici dijo que se va a reunir “con la patronal para aclarar esta situación. No obstante nuestro gremio rechaza los descuentos y no se descartan medidas de fuerza”, subrayó.
La empresa, el pasado 13 de mayo, informó que se aplicaría un plan de emergencia con la interrupción de tareas todos los viernes de mayo y junio, como consecuencia de la merma de demanda desde Brasil.
Entonces, la compañía norteamericana garantizó que mantendría los puestos de trabajo y los sueldos. El gobernador Antonio Bonfatti dio el miércoles un mensaje de tranquilidad a los trabajadores, al señalar que “se trataba de una situación de alerta, pero no de mayor conflicto”.
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