viernes, 2 de agosto de 2013

currió este jueves a la siesta en Vera, en la Provincia de Santa Fe. La Justicia le prohibía acercarse a su pareja: la roció con combustible y le prendió fuego

Ocurrió este jueves a la siesta en Vera, en la Provincia de Santa Fe. Un entredicho terminó con la mujer internada por quemaduras. El agresor fue detenido.
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Una mujer sufrió quemaduras y debió ser hospitalizada tras una discusión con su ex pareja ocurrida este jueves a la siesta en una vivienda de la zona del barrio Caballería, ubicado en la periferia norte de la localidad de Vera.

Lidia Graciela Ojeda, de 36 años, mantenía un violento cruce de palabras con su ex concubino, Roque José Chanda, de 35 años, en el interior de la vivienda ubicada en Lavalle al 1000, de Vera. 

En el momento más álgido de la rencilla, las verbalizaciones dejaron de conformar al sujeto que decidió emprender una acción más directa y criminal contra su desprotegida ex compañera: tomó un bidón con combustible, roció el cuerpo de la mujer y, con un encendedor, le prendió fuego provocándole quemaduras.

La policía y personal de emergencias médicas socorrieron a la víctima y la trasladaron al centro de salud local, cerca de las 14. Los médicos asistieron a la víctima en el hospital y evaluaron la derivación a un centro de salud especializado, aunque luego desecharon esa posibilidad.

Al momento de las primeras atenciones, Lidia Ojeda presentaba quemaduras en el rostro, en la zona lateral izquierda de su pecho y en ambas manos, aunque, en principio, sólo serían de carácter leve. La mujer fue atendida en la guardia del Hospital y luego internada en una sala de cuidados.

Desobediencia

Una medida judicial prohibía el acercamiento de Roque José Chanda a la víctima, a raíz de otras denuncias anteriores realizadas por la mujer en su contra.

Ahora, Chanda -que es changarín de oficio- fue arrestado por la policía y permanece incomunicado en la alcaidía de la Unidad Regional. La policía secuestró en el interior de la vivienda un bidón con nafta y un encendedor, que habrían sido utlizados por el agresor.

La evolución de la salud de su pareja será clave para determinar los cargos que se le imputen, aunque ya se configura como un caso de desobediencia judicial y tentativa de homicidio, por amenazas de muerte. Interviene en el caso el Juzgado de Instrucción Distrito Judicial Nro. 13.

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