viernes, 5 de abril de 2013

SANTA FE. Cada 100 vehículos con GNC en el país, hay más de ocho santafesinos


La nafta rompió en Santa Fe la barrera de los ocho pesos, mientras que el gas natural comprimido cuesta menos de tres. En 10 mil kilómetros se recupera la inversión en la instalación del equipo.
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Cada 100 vehículos con GNC en el país, hay más de ocho santafesinos
Según los últimos datos disponibles del Ente Nacional Regulador del Gas (Enargás), en la provincia de Santa Fe hay 128.816 vehículos que funcionan con Gas Natural Comprimido (GNC), cifra que representa un 8,47 por ciento del parque automotor con esas características en el territorio nacional.

Santa Fe es el segundo mayor destino de la cantidad de gas distribuida en las estaciones de todo el país, con un 13,54 por ciento del total nacional. La precede la provincia de Buenos Aires, con un 43,04 por ciento; y la siguen Córdoba (8,86 por ciento), Ciudad Autónoma de Buenos Aires (0,55 por ciento) y Mendoza (0,16 por ciento).

Las cifras reflejan lo ocurrido en los últimos años en cuanto a la instalación de equipos de GNC tanto en vehículos que prestan el servicio de taxi o remís como en particulares. Por día, en la capital provincial santafesina se convierten al menos diez automotores.

En diálogo con Diario UNO, Eduardo Barbotti, vicepresidente de la Cámara de Talleres Integrales de GNC y afines se refirió a las estadísticas del rubro en 2012 y sintetizó: “El movimiento el año pasado fue constante e incluso se incrementó en los últimos meses cuando mucha gente cambia el auto”. Con respecto a 2013, agregó que “hay una demanda sostenida en las consultas, mucha gente se interioriza sobre el tema a través de la web, por ejemplo”.

En relación a los motivos que impulsan a muchos ciudadanos a reemplazar la nafta por el GNC, Barbotti comenzó a enumerar: “La nafta superó en Santa Fe los ocho pesos, que es incluso una barrera psicológica, porque el número obliga a tomar más conciencia del valor real del combustible. Mientras, el metro cúbico de GNC cuesta menos de tres pesos y rinde el equivalente a 1,16 litros de nafta”.

Por otra parte, el vicepresidente de la Cámara consignó otro punto de la actualidad y explicó que “la gente cada vez vive más lejos de los lugares de trabajo, porque la ciudad se expande y hay barrios que quedaron a varios kilómetros del centro, mientras que muchos se mudaron también a otras localidades, como Recreo, Sauce Viejo, Rincón o a barrios privados alejados”. La distancia deriva en forma lógica en un mayor consumo de combustible en función de los kilómetros recorridos.

Haciendo números
“Los costos se mantienen muy estables, porque el rubro no corrió la suerte de otros precios. La oblea cuesta lo mismo que el año pasado y los equipos subieron muy poco”, afirmó Barbotti.

—¿Cuánto cuesta la instalación de un equipo de GNC?
—Un equipo de quinta generación cuesta 9.500 pesos, siempre hablando de un tanque de 14,5 metros cúbicos. Uno de cuarta generación lazo cerrado, alrededor de 7.300 pesos; uno de tercera generación, 6.700; y uno para carburador, 5.900 pesos.

—¿En qué tiempo se puede recuperar la inversión realizada?
—El retorno de la inversión se hace en unos 10 mil kilómetros, porque uno auto hace en promedio unos 10 kilómetros por litro de nafta. En 10 mil kilómetros se gastan mil litros de nafta, que suman unos ocho mil pesos; por lo cual, en menos de un año recupera lo que invirtió, ya que la mayoría de los vehículos hace un promedio de 15 mil kilómetros anuales.

—¿Cuántos talleres habilitados hay en la zona?
—Hay 16 talleres habilitados en la ciudad, otros cuatro en Santo Tomé, dos en Esperanza y también en San Carlos. La zona es de las que más talleres tiene, en proporción, en el país.
“El GNC sigue siendo muy económico, la tendencia es hacia el uso de GNC. La tecnología de los equipos hoy acompaña para que los autos de alto desarrollo antipolución funcionen muy bien. Además, son equipos muy confiables a nivel seguridad, con buena prestación a nivel respuesta y compensación ecológica”, resaltó el vicepresidente de la Cámara de Talleres Integrales de GNC y afines.

Otros beneficios
Se extrae del subsuelo (debajo de la tierra o del mar) y representa hoy en día, gracias a la falta de impurezas y residuos de combustión, el combustible ecológico por antonomasia. El gas natural para vehículos automotores se comprime dentro de cilindros de acero especial a una presión de 200 kg/cm².

El GNC no contiene aditivos, no se producen depósitos carbonosos en las cámaras de combustión, ni fenómenos de corrosión. La mezcla con el aire resulta perfecta a todos los niveles de temperatura y la combustión es total. Las características del aceite del motor del vehículo se mantienen por más tiempo, y esto aporta mayores beneficios a la vida útil del motor.

Según la web www.barbotti.com, el gas natural contamina menos la atmósfera que la gasolina. La emisión de monóxido de carbono baja un 95 por ciento y las de hidrocarburos, un 80 por ciento. La emisión de óxidos de nitrógeno desciende un 30 por ciento. Además, la producción de gas natural es mucho más limpia que transportar y refinar petróleo y luego generar electricidad.

Los tanques de gas natural y las estaciones de carga son sistemas cerrados. El uso de gasolina implica que una cierta cantidad de la misma se evapore del tanque de combustible, contribuyendo con casi la mitad de la contaminación por hidrocarburos asociado con el uso de vehículos que funcionan con gasolina.

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