sábado, 16 de marzo de 2013

La oposición no cree que Mendoza pueda afrontar la inversión que dejó Vale


Luego de que el Gobierno dictara la “conciliación obligatoria” y prometiera la continuidad del proyecto, los radicales Ernesto Sanz y Julio Cobos pusieron en duda la capacidad de la provincia para hacerse cargo del megaproyecto
 

La oposición no cree que Mendoza pueda afrontar la inversión que dejó Vale

 "Me da gracia que digan que el gobierno de Mendoza se va a hacer cargo de las inversiones, si no pueden pagar el sueldo a los maestros", lanzó Sanz esta tarde en diálogo con Radio Mitre al referirse a la disputa que mantienen el gobierno nacional y el de esa provincia con la firma brasileña, luego de que ésta anunciara que desistirá de explotar el yacimiento de potasio Río Colorado.

También el ex vicepresidente Cobos se mostró escéptico con respecto a esa posibilidad. "Estamos hablando de una inversión de más de 30 mil millones de pesos y el presupuesto para las obras de toda la provincia es de 2.000 millones al año", planteó en declaraciones a AM 1110 más temprano. "Es una provincia que tiene déficit fiscal", insistió.

Ambos dirigentes mendocinos refutaron así la promesa del gobernador Francisco “Paco” Pérez de que el emprendimiento, presentado como uno de los más importantes de los últimos años y que compromete miles de puestos de trabajo, continuará “con o sin Vale”.

La salida de la compañía tomó por sorpresa al Gobierno, que, luego de días de negociaciones y de estudiar “alternativas”, denunció esta tarde que Vale “viola la seguridad jurídica del país”.

Sin embargo, a juicio de Sanz la decisión de la empresa no debe sorprender a nadie. "Resulta que ahora estas razones no son las reales, ahora hay que echarles la culpa a los brasileños, que son unos desalmados; un papelón, una vergüenza".

“Les cuesta a los gobernadores y al Gobierno (admitir) lo que es más obvio, que es que en la Argentina las condiciones macroeconómicas no son tentadoras para nadie”, afirmó. Según dijo, el país "perdió esta inversión porque el Gobierno no sabe cómo resolver el problema de la inflación". Y añadió: "El tipo de cambio es una espada de Damocles".

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