Los Ministros de Justicia y Derechos Humanos, Juan Lewis, y de Trabajo y Seguridad Social, Julio Genesini, participarán de los actos de cierre de los cursos de formación laboral en oficios destinados a adultos y jóvenes en conflicto con la ley penal sometidos a medidas judiciales, los cuales se desarrollaron desde septiembre en el marco del llamado protocolo 16/12. Este convenio, realizado entre los ministerios de Trabajo de la Nación y de la provincia, forma parte del Plan Integral para la Promoción del Empleo, y busca facilitar la reinserción social.
El acto en la ciudad de Santa Fe tendrá lugar mañana a las 17 en el Multiespacio Santa Rosa de Lima (ex CAI), de Mendoza y Lamadrid, dependiente del Ministerio de Desarrollo Social. En tanto la clausura en Rosario se desarrollará el jueves 13 de diciembre en la Casa del Adolescente, que funciona en la órbita de la Dirección de Justicia Penal Juvenil. En ambos casos se entregarán los diplomas a los asistentes a los cursos.
De la actividad participarán también el secretario de Asuntos Penitenciarios del Ministerio de Seguridad, Pablo Cocochioni; la subsecretaria de Asuntos Penales, Débora Cotichini; y el director de Control y Asistencia Pos Penitenciaria, Pablo Bufarini, ambos del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, así como funcionarios de las carteras de Desarrollo Social provincial y de Trabajo de la Nación, entre otras autoridades.
En el marco de esta capacitación, se dictaron para los adultos cursos de herrería, serigrafía, asistente de ventas en panadería y manipulación de alimentos y ayudante en panadería (en Rosario) y de auxiliar soldador por arco, electricista y talabartería (en Santa Fe). En cuanto a los jóvenes, se impartieron cursos de serigrafía, carpintería, herrería y gastronomía dinámica.
Desde el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos explicaron que estas actividades fueron destinadas a personas alojadas en las unidades penitenciarias con salidas transitorias, personas que egresan de la cárcel con libertad condicional y asistida, personas con detención domiciliaria, con condena condicional y sometidas a medidas en el medio libre, alternativas al juicio y a la prisión; así como a jóvenes entre 16 y 18 años infractores de las leyes penales que se encuentran en el Instituto de Rehabilitación del Adolescente de Rosario (Irar) o con medidas judiciales en el medio libre. A lo que se agregaron jóvenes y adultos inscriptos en la Oficina de Empleo de las municipalidades de Santa Fe y de Rosario y jóvenes participantes de talleres organizados por la Secretaría de Prevención y Seguridad Comunitaria.
FORMACIÓN INTEGRAL Y REINTEGRACIÓN SOCIAL
En cumplimiento de lo dispuesto por la normativa nacional e internacional, las políticas públicas implementadas por el gobierno de la provincia tienen por objetivo garantizar y mejorar las oportunidades de reintegración social, formación integral y futura inserción laboral, articulando la apertura de espacios que permitan gestar nuevas alternativas de inclusión, desde la premisa de que las personas en conflicto con la ley penal son “sujetos de derecho”, explicaron desde el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos.
“A través de la capacitación en oficios se fomenta la construcción de redes sociales, tanto dentro como fuera de lo institucional, que garanticen la construcción de ciudadanía. La capacitación apunta a educar en el conocimiento de los deberes y derechos ciudadanos, en su ejercicio cotidiano, en el respecto por el derecho de los otros y la valoración de la vida en sociedad”, señalaron desde el área.
Estos cursos, destinados a la inclusión social de jóvenes y adultos imputados de cometer delitos, tienen como objetivo que la persona que se capacite logre apropiarse de recursos para fortalecer sus lazos sociales, generando posibilidades efectivas de educación formal, capacitación laboral y práctica laboral, a través de estrategias del Estado que apelan a recursos públicos, y en conjunto con la sociedad civil.
“Este tipo de ofertas de capacitación laboral permite que los destinatarios encuentren posibilidades de iniciar y generar nuevas relaciones sociales desde un posicionamiento diferente, a partir de incorporarse a un oficio. Se pretende contribuir no sólo a la creación de hábitos laborales en los alumnos, sino también que adquieran técnicas específicas que hacen a los oficios”, finalizaron desde la Subsecretaría de Asuntos Penales.
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