El Ministro de Aguas y Servicios Publicos, Antonio Ciancio, dijo que a las cuadrillas les llevará ese tiempo promedio reponer el servicio. Aludió tanto a las interrupciones programadas como a las fallas sorpresivas del sistema.
Según el gobierno santafesino, la Empresa Provincial de la Energía (EPE) está “mejor preparada” para atravesar el verano próximo con menos conflictos que el accidentado inicio de 2012. “Estamos verificando una mayor capacidad de respuesta respecto a años anteriores para reponer el servicio”, destacó el ministro de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente, Antonio Ciancio. El funcionario precisó que ahora, en promedio, los cortes de luz “no superarán las tres horas” producto del accionar de las cuadrillas de la compañía cuando antes duraban “seis o siete horas”.
En un extenso diálogo con UNO Medios, Ciancio analizó el escenario para el verano 2013, tras las primeras jornadas agobiantes de fines de año. “En estos días el sistema respondió bien”, destacó el ministro quien además defendió los cortes programados, repasó las inversiones en marcha, habló del cuadro tarifario y desestimó que la provincia pueda padecer un apagón como el registrado en Capital Federal.
“Para 2013 estamos un poco mejor, pero los resultados dependen del clima, del consumo eficiente y de cuestiones aleatorias”, advirtió el funcionario para después agregar con cautela: “Hemos trabajado para que este verano sea mejor que el anterior. En marzo sabremos cómo fue”.
Luego, el titular de la cartera de Servicios Públicos remarcó: “Conocemos cuáles son los problemas, sabemos qué hacer y dónde, tenemos los proyectos. Lo que necesitamos son recursos que no siempre están en la medida esperada. Pero la decisión del gobierno provincial fue sostener tanto la EPE como Assa (Aguas Santafesinas SA), que como todos saben no las tomamos en el mejor estado”.
De inmediato, el ministro aclaró: “No le echamos la culpa a los demás, hace cinco años que estamos gobernando la provincia. Pero hay un axioma que aprendí mientras trabajaba en la construcción, el costo y el tiempo de la reparación es directamente proporcional al daño producido. Esto sirve para explicar lo que lleva arreglar un desperfecto”.
Al respecto, Ciancio ponderó la mejora en los tiempos de reposición del servicio que registró la EPE. “Antes se tardaban seis, siete horas, porque había pocos vehículos y menos personal. Ahora tenemos más gente en la calle, hay una fuerte renovación generacional. Y estamos entre las dos y tres horas de reposición. Incluso ése es el plazo que vamos a manejar para los cortes programados”, indicó.
Respecto a las interrupciones preventivas del servicio, Ciancio apuntó que “no se pueden precisar con mucha antelación, depende de cómo se presenta cada jornada. En la medida en que superemos los 2.000 megavatios de potencia habrá cortes programados. Es lo que puede entregar el sistema, es como un auto, uno puede circular a una determinada velocidad, entonces para qué fundirlo si regulando el uso se puede evitar”.
Durante la semana que pasó, con térmicas que superaron los 35 grados, el pico de consumo se registró el lunes 5 de noviembre, a las 21, con 1.622 megavatios. “No es una decisión fácil, tiene sus costos, pero el daño es menor para la red”, agregó.
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